miércoles, 3 de febrero de 2010

Te deseo.

Un poema de Sérgio Jockymann

Sérgio Jockymann es un periodista, poeta y dramaturgo brasileño nacido en 1930. Es autor de este poema que fue publicado en el Jornal Folha da Tarde en 1980 y se suele atribuir a Victor Hugo.

TE DESEO

Te deseo primero que ames, y que amando también seas amado.
y que, de no ser así, seas breve en olvidar
y que después de olvidar, no guardes rencores.

Te deseo también que tengas amigos,
y que, incluso malos e inconsecuentes,
sean valientes y fieles, y que por lo menos
haya uno en quien confiar sin dudar.

Y porque la vida es así,
te deseo que tengas enemigos,
ni muchos ni pocos, en la medida exacta para que,
algunas veces, te cuestiones tus propias certezas,
y que entre ellos, haya por lo menos uno que sea justo,
para que no te sientas demasiado seguro.

Te deseo además que seas útil, mas no insustituible.
Y que en los momentos malos,
cuando no quede más nada,
esa utilidad sea suficiente para mantenerte en pie.

Igualmente te deseo que seas tolerante,
no con los que se equivocan poco,
porque eso es fácil, sino con los que
se equivocan mucho e irremediablemente,
y que haciendo buen uso de esa tolerancia,
sirvas de ejemplo a otros.

Te deseo que siendo joven no madures demasiado deprisa,
y que ya maduro, no insistas en rejuvenecer,
y que siendo viejo no te dediques al desespero.
porque cada edad tiene su placer y su dolor
y es necesario dejar que fluyan entre nosotros.

Te deseo que descubras,
con urgencia máxima, por encima y a pesar de todo,
que existe y que te rodean, seres oprimidos,
tratados con injusticia y personas infelices.

Deseo también que plantes tu semilla,
por más minúscula que sea,
y la acompañes en su crecimiento,
para que descubras de cuantas vidas está hecho un árbol.

Te deseo, además, que tengas dinero,
porque es necesario ser práctico,
y que por lo menos una vez por año,
pongas algo de ese dinero frente a ti
y digas:”esto es mío”,
sólo para que quede claro quién es el dueño de quien.

Te deseo también que ninguno de tus afectos muera,
pero que si muere alguno puedas llorar
sin lamentarte y sufrir, sin sentirte culpable
si todas estas cosas llegaran a pasar,
no tengo nada más que desearte.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Me ha dejado sin palabras, en esa brevedad de las palabras sinceras y del deseo de afrontar la vida con sus sinsabores y alegrías, en este caso para un ser muy querido, me parece muy enternecedora, muy buena, un saludo,Isabel.

Carmen Hernández dijo...

Y yo te deseo Ana que las lágrimas derramadas las beba la tierra, y que de ellas brote un roble con un tronco inmenso al que abrazarte, cuando los vientos soplen recios y veas salir el sol de la alegría. Un abrazo.

Ana Maria Rey Merino dijo...

SOLO PUEDO DAROS LAS GRACIAS DESDE LO MAS SENSIBLE Y DOLORIDO DE MI ALMA.