Letras y voces de mujer.
12 de agosto de 2008.
En el último número de “El País Semanal”, la portada era ocupada por un texto: Cien escritores en español eligen los 100 libros que cambiaron su vida.
Los libros me apasionan, así que acudí presta a buscar el artículo en el que Benjamín Prado analizaba el resultado de la consulta. Comenzaba “De un lugar de la Mancha al despertar de la conciencia feminista, con parada en otros 98 escenarios de la literatura universal”. Era la referencia a que las personas preguntadas concedieron el primer lugar a Don Quijote de la Mancha y el último a El segundo sexo.
En la página web de El País se proporcionan todos los nombres de los escritores y escritoras consultadas y los diez títulos que a cada cual le ha influido, salvo en el caso del granadino Francisco Ayala que solo aportó el de Cervantes.
Teniendo en cuenta todas las consideraciones que se hacen sobre los datos que se aportan y que en algunos casos dejan mucho que desear, he de reconocer que esas páginas me han tenido entretenida todo el fin de semana.
Todo cuanto veo, escucho y leo lo analizo con una perspectiva de género, por lo que en un primer vistazo conté cuantos de los cien libros estaban escritos por mujeres, y en la lista aparecen “El corazón es un cazador solitario” de la estadounidense Carson McCuller; “Las olas” y “Orlando” de británica Virginia Wolf; “Orgullo y prejuicio” de la novelista inglesa Jane Austen y la mencionada obra de la francesa Simone de Beauvoir en los puestos 28, 62, 92, 71 y 100 respectivamente. Conclusión, solo cinco de las cien obras seleccionadas están escritas por una dama.
¿Cuántas de las cien personas consultadas eran mujeres? Es un dato importante para analizar este dramático resultado. Y ciertamente compruebo que solo 24 lo son, es decir que falta una para el 25%, por lo que no alcanza el nivel de paridad, que nos permitiría tener una visión más real.
¿Cuántos de los 76 varones consultados han sentido que la escritura de una mujer ha influido en su vida? Solo 12, de los cuales el guionista y director de cine madrileño Ray Loriga, el narrador vallisoletano Gustavo Martín Zarzo, el escritor y traductor vasco Kirmen Uribe y el ensayista ecuatoriano Leonardo Valencia, proponen el nombres de dos autoras cada uno, reconociendo sus importantes aportaciones. Punteo de nuevo el listado y de los 751 textos propuestos por los escritores, solo 16 los firman señoras, lo que en porcentaje es de poco más del 2.
¿De las mujeres consultadas cuantas han aportado títulos de autoras? Repaso los datos en la página web y compruebo que 20 lo hacen, la mayoría con más de una opción, destacando con cuatro cada una, la escritora catalana Nuria Amat; la novelista mejicana Carmen Boullosa y la poetisa gaditana Ana Rossetti. El total es de 46, y esto supone que los 240 títulos que aportan, más del 19 % es de una autora. La quinta parte de las consultada (4) ignoran las obra de otra mujer.
Tengo especial curiosidad por saber que autoras les resultan más atractivas a ellos. Fundamentalmente las obras que se han clasificado, descartando el de Beauvoir. Pero también las novelas de la francesa Margarite Duras “El arrebato de L.V. Stein” y “La tarde del señor Andesmas”; “Ariel” poemario de Sylvia Plath, la primera poetisa premiada con el Pulitzer (aunque a titulo póstumo); “Ensayos sobre la condición obrera” de Simone Weil; “Reunión en el restaurante Nostalgia” de la experta en best-seller Anne Tyler; las obras “Querido Miguel” y “ Léxico familiar” de la comunista italiana Natalia Ginzburg;“La mujer en silencio” de Janet Malcolm;“El tiempo, gran escultor” de Marguerite Yourcenar; “Claros del bosque” de magnífica filosofa malagueña María Zambrano y “Las edades de Lulú” de Almudena Grandes.
Termino el análisis con la firme convicción de que tenemos una asignatura pendiente en las escuelas y los institutos en lo que se refiere a la literatura y la poesía escrita por mujeres de todos los tiempos y de todo el mundo. Si a nuestros jóvenes no se les presentan a las autoras, difícilmente accederán a ellas, y por tanto no podrán influir en sus vidas, y jamás podrán amar su obra.
Por eso la insistencia de las asociaciones de mujeres, a las que de paso felicito por su merecido reconocimiento ”Ciudad de Guadix”, de que el Aula Abentofail realice una propuesta seria para dar a conocer la voz y el trabajo de las señoras que escriben en Granada, Andalucía y España, por no salir de nuestras fronteras.